Estudio sobre reciclaje en colegios revela las brechas para mejorar las tasas de valorización

Según el primer Estudio Nacional de Reciclaje en Establecimientos Educacionales, en Chile el 90% de los establecimientos educacionales incluyen temas de reciclaje en alguna de sus asignaturas. Sin embargo, un 48% no recolecta envases y embalajes para su posterior reciclaje.

Dentro de los hallazgos del estudio realizado por Kyklos junto a Tetra Pak, está que la principal brecha para reciclar de los colegios es la falta de opciones de retiro, siendo en algunos casos los mismos establecimientos los que deben llevar sus residuos a un punto limpio.

Por lo que propusieron buscar la forma de integrar a los establecimientos dentro de la Ley REP y generar una estrategia, vinculada a sus municipios con el fin de destrabar el tema del acopio y retiro de sus envases y embalajes.

“Se necesita financiamiento para pagar la infraestructura y la operación (…) pero ese financiamiento es escaso. Por eso es tan bueno el tema de la Ley REP, porque aparece ese financiamiento”, comentó Isidro Pereda, Gerente de Proyecto ReSimple.

La investigación, realizada a través de una encuesta aplicada a más de 1.600 establecimientos del país y apoyada por focus group a parte de la muestra, da cuenta de las dificultades que existen en los colegios para la valorización de residuos.

En esa línea, Tomás Saieg, jefe de Economía Circular del Ministerio de Medio Ambiente (MMA) indicó que existe material de libre disposición en el MMA, que se puede aprovechar para promover la cultura ambiental en los colegios, que debe ir mucho más allá del reciclaje.

A su vez destacó que cada territorio vive realidades distintas, y que los colegios deben encontrar su propia fórmula que va a depender de dónde se encuentren. “A medida que se vayan desplegando sistemas de reciclaje mucho más masivos que los que conocemos hoy, los mismos sistemas van a decir cómo están operando y cómo les sirve retirar los residuos. Y esa parte se va a ir facilitando”, declaró Saieg.

Dentro de los establecimientos educacionales la mayor parte de los residuos provienen de la alimentación, tanto de las comidas que se sirven en los comedores (casinos) como en los alimentos que llevan desde sus hogares. Por lo que existe un espacio para trabajar con Junaeb los residuos de envases y embalajes; mientras que los residuos orgánicos se pueden valorizar de forma local, ya que no necesitan una cadena logística tan compleja.

Por su parte, Antonia Biggs, gerente general de la Asociación Nacional de la Industria del Reciclaje (ANIR) puso a disposición a ANIR para colaborar en materia educativa.

“Estamos felices de colaborar. Pueden venir a ver cómo se tiene que recibir el material porque la clave para que exista un buen reciclaje, va a ser que el material sea de calidad y que se pueda valorizar. Y eso va a depender de todos nosotros, de los niños, profesores y de todos los que participan en la cadena”, explicó.