Opinión
Chile sin niños: el aula vacía de un país que envejece
Esta crisis silenciosa no se resuelve con decretos, sino con una mirada humana. Hay que cuidar a las escuelas pequeñas, proteger a sus maestros, y entender que cada cierre arranca una raíz del territorio. En tiempos donde el país se contrae, la escuela debe expandir su sentido: volver a ser refugio, comunidad y esperanza.