
Tropezones y tropezones
Es difícil entender cómo algo inapropiado en los cobros de la luz estuvo ocurriendo por años, sin que hubieran chequeos permanentes al modelo que fija los precios.
Es difícil entender cómo algo inapropiado en los cobros de la luz estuvo ocurriendo por años, sin que hubieran chequeos permanentes al modelo que fija los precios.
El galardón dado hace pocas horas a María Corina Machado, la eterna opositora de Nicolás Maduro en Venezuela, retoma el mensaje de mostrar el valor del genuino camino democrático
Han pasado 62 años del asesinato del presidente John Kennedy. ¿Un loquito suelto o una conspiración mayúscula, que incluye a los servicios secretos y de inteligencia de EEUU?
La esencia del rugby es el apoyo. Una palabra que, en la vida diaria, se dice mucho más de lo que se practica. En el rugby, como lo demostraron los Cóndores hace pocos días, el apoyo fue instrumental para la victoria y la clasificación al Mundial.
El turismo histórico rinde si se hace bien. Si no descansa en sus ya obtenidos galardones internacionales e invierte, año a año, en mejor calidad de atención y cuidado al público, que busca maravillarse con esos parajes.
La esencia de un debate descansa en cómo cada candidato se desmarca del resto, para colocar su individualidad como superior a la de sus adversarios. A pesar de señalar que van a gobernar para todos los chilenos, esa idea no se materializa durante la elección, donde prima "el yo versus todos ustedes".
Los Bots, malintencionadamente usados, son la traición al proceso democrático, a través de institucionalizar a la mentira y el engaño como guía de nuestras decisiones.
El "Pato Cojo" suena a un animal disminuido y dañado. En política, sin embargo, puede tener un poder enorme para paralizar -durante varios meses- legislativamente un país.
Renunciar al cargo, en este ministerio de poquísima proyección posterior, tiene un dejo de mensaje agotador: "No aguanto más, no quiero más, no doy más".
El único indolente frente a la Falacia Lógica es el fanático. Que, como dijo Winston Churchill, "es alguien que no puede cambiar de opinión y no quiere cambiar de tema".